En esta ocasión, no pudo ser, el conjunto vallisoletano del Ponce Ginemédica recibía a unos de los mejores conjuntos del Grupo A de la Liga Femenina 2, el Hierros Díaz Miralvalle Plasencia, desde el comienzo del partido, se vio como la superioridad física de las extremeñas y la baja de Yohanna Morton iban a hacer casi imposible lograr la victoria, como así ocurrió cayendo derrotadas finalmente por un contundente 46-73.
Desde el primer minuto, Miralvalle Plasencia impuso un ritmo lento, calmado, con ataques largos y evitando cometer errores no forzados, con ataques trabajados, para lograr posiciones con superioridad bajo canasta, y hacer efectiva su superioridad física, logrando prácticamente todos los puntos del primer cuarto con buenas combinaciones de fuera a dentro.
El conjunto vallisoletano lo intentaba pero las jugadoras locales no lograban contrarrestar esa superioridad numérica, sin embargo las penetraciones en ataque de Pilar Valderrábano, permitía que las vallisoletanas pudieran mantener cierta igualdad en el marcador con un 7-10, que fue solo un espejismo ya que las extremeñas volvieron a aumentar su rigidez defensiva y lograron un parcial de 9-20 para llegar al final del primer cuarto.
En el comienzo del segundo cuarto, no hubo muchos cambios, la falta de fluidez ofensiva continuaba en el conjunto entrenado por Chuchi Fernández que no encontraban lanzamientos claros a canasta, teniendo que buscar lanzamientos lejanos que no entraban, así el parcial continuaba en aumento para el conjunto visitante que seguía anotando bajo aro y continuaban con su gran nivel defensivo, todo esto unido a la ausencia por lesión de Yohanna Morton, en la fase final de su recuperación, daba paso al descanso con un marcador de 13-40 que reflejaba la superioridad de las extremeñas.
Tras la vuelta de vestuarios, Ponce Ginemédica trató de cambiar el ritmo del partido, buscando dos contra uno y defensa a toda la cancha, sabedor de que debía modificar algo para poder tener buenas sensaciones, más allá del resultado. Las visitantes lograron llegar a la barrera de los treinta puntos de diferencia, distancia insalvable al finalizar el tercer periodo, a pesar del triple sobre la bocina de Isabel Camiña (28-58).
A pesar del marcador tan abultado a favor de Plasencia, las de Chuchi Fernández salieron al último cuarto con la idea de pelear hasta el final para, al menos, vencer en el parcial del cuarto. Un parcial de 7-3 a favor de Ponce Ginemédica obligaba al entrenador rival a pedir tiempo muerto y demostraba que las vallisoletanas querían marcharse, al menos, con buenas sensaciones. Con el paso de los minutos, Plasencia volvió a mostrar su dominio, esta vez con el acierto desde el tiro exterior, el único punto desde el que le faltaba por acertar. Un acierto que también encontró Ponce, con un triple de Gloria Izquierdo que daba la ventaja en el parcial del cuarto. Y fue gracias a esos buenos minutos y sensaciones finales cómo el conjunto vallisoletano pudo reducir la desventaja por debajo de los treinta puntos, dejando el marcador final en 46-73.
Esta derrota deja al Ponce Ginemédica con tres victorias y cinco partidos perdidos, aún con distancia respecto a los puestos de descenso y en la zona media de la tabla.
Ficha técnica:
Ponce Ginemédica (46): Alejandra Fernández, Lorena García (2), Miriam Manso (2), Pilar Valderrábano (13), Irene De la Fuente (2) -quinteto inicial-, Julia Tejedor, Cristina Niño (12), Clauda López (4), Aitana Nuevo, Gloria Izquierdo (7) e Isabel Camiña (4).
Miralvalle Plasencia (73): Moyano (9), Jiménez (11), Romero (11), Florez (9), Shaw (19) -quinteto inicial-, Lázaro (2), De Meyer (10) y Horford (2).
